viernes, 24 de octubre de 2014
Misión lunar pone a prueba el programa espacial de China 2210450
Por Katie Hunt, CNN
(CNN) — China dice que lanzó una nave espacial experimental este viernes que orbitará la Luna antes de regresar a la Tierra, en una primicia para el ambicioso programa espacial del país.
La nave espacial no tripulada fue lanzada por un cohete Long March 3C desde el Centro de Lanzamiento de Satélites Xichang en Sichuan, al occidente de China, según los medios estatales.
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Este es el primer módulo lunar de China capaz de regresar a la Tierra y el principal desafío técnico de la misión será asegurarse de que la nave espacial reduzca su velocidad lo suficiente para volver a entrar a la atmósfera de la Tierra de forma segura.
Si va demasiado rápido podría sobrecalentarse o dificultar su rastreo y control, según lo que dijo Hu Hao, diseñador del programa de exploración lunar, a The China Daily.
Se espera que le tome una semana volar alrededor de la Luna y después aterrizará en las praderas de Mongolia interior.
La misión prueba la tecnología que será utilizada en un lanzamiento más ambicioso, programado para 2017, cuando una sonda lunar no tripulada vaya a la Luna, colecte muestras de tierra y regrese a casa.
Los astronautas chinos hicieron cinco vuelos espaciales no tripulados en una serie de módulos Divine Vessel de Shenzhou, con la misión más reciente en 2013 completando un acoplamiento manual exitoso con la estación espacial Tiangong-1.
En diciembre pasado, China puso un rover conocido como el Jade Rabbit, en la Luna, pero ha tenido muchos problemas mecánicos, dijo The China Daily.
¿En camino a la Luna?
Joan Johnson-Freese, un profesor del Colegio Naval de Guerra de Estados Unidos, dijo que el orbitador lunar marca un avance en las capacidades necesarias para un programa potencial lunar tripulado, que aunque está en discusiones no ha sido aprobado oficialmente todavía.
"Su significado no solo está en demostrar sus capacidades técnicas, sino en una voluntad política continua para aprobar sus objetivos espaciales en largos periodos; que es lo que tiene China que actualmente no tiene Estados Unidos”.
Mientras Estados Unidos retiró su programa espacial, otros países intentan igualar o superar los logros de China en lo que los observadores llamaron una carrera espacial asiática. En septiembre, India se convirtió en el primer país asiático en enviar un orbitador alrededor de Marte.
Simbolismo político
China envió a su primer astronauta al espacio en 2003 y avanzó rápidamente en la década transcurrida.
A pesar de esto, su programa espacial todavía tiene que lograr capacidades alcanzadas por Estados Unidos y la entonces Unión Soviética hace años, de acuerdo con James A. Lewis, director y miembro del Centro para Estudios Estratégicos e Internacionales en Washington, Estados Unidos.
Con poca ventaja económica o militar, su valor, dice, está en cómo el programa espacial forma la percepción de China de sí misma; una muestra visible de poder nacional y riqueza que impone el regreso de China a la confianza y la autoridad.
"Podríamos preguntar si China sigue una receta anticuada para el estatus de superpoder”, escribe en un blog para la Universidad de Nottingham en Reino Unido.
"En términos del efecto global del programa tripulado, podría haber algo de verdad en esto. Pero para la audiencia local que es la principal preocupación de los líderes de China, el programa espacial produce resultados invaluables”.
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